lunes, 31 de marzo de 2008

El rincón de Cruces

Batallitas.
Vaya esta semana mi rincón a esas historias reales de nuestra vida y que contamos con el paso del tiempo, sí, las batallitas de nuestra juventud o nuestra niñez. Pues sí, el pasado domingo en la concentración de los benjamines en el pabellón municipal de Chipiona tuve el honor de compartir un rato con Juan Carlos Claver, un gran amigo del baloncesto y uno de los culpables de que muchos tengamos el gusanillo del baloncesto en nuestras venas. Juan Carlos Claver desde su muy ocupada vida, es hermano mayor de la Hermandad de la Virgen de Regla del Pinar, juez de paz, excelente orador que presenta de forma altruista muchos eventos culturales y sociales de nuestro pueblo, me contaba esas batallitas cuando el empezó a jugar al baloncesto en la cancha verde del colegio Virgen de Regla con sus compañeros y amigos de clase. Todos ellos se iniciaron en el baloncesto gracias a los franciscanos y en especial tuvo mucha culpa Fray Antonio Alcaide (también fue mi primer y único entrenador cuando yo jugaba con el equipo del colegio), un hombre caval, serio, muy respetuoso con todo el mundo y un gran maestro. Fray Antonio respiraba baloncesto por los cuatro costados. Cuantas tardes después de clase, cuantos domingos después de misa de diez muchos chipioneros que estudiamos en el colegio Virgen de Regla jugabamos a baloncesto y siempre estaba allí Fray Antonio Alcaide, vigilante, parco en palabras pero buen consejero. Muchos son lo que han seguido con el baloncesto gracias a Fray Antonio, y uno de ellos es Juan Carlos Claver, que a parte de jugador fue durante muchos años Presidente del Club Baloncesto Juventud de Regla llevando al baloncesto de Chipiona a lo más alto: La liga EBA. En Chipiona se celebró incluso una fase final de liga EBA, participando el Juventud de Regla con Juan Carlos Claver de Presidente y nuestros jugadores Julian Bueno Valdés y Pepito Carrera en aquel equipo. Juan Carlos Claver no estuvo solo en sus comienzos, también nuestro cronista de la villa Juan Luis Molero Naval junto con otros muchos que apostaron y lucharon por el baloncesto en Chipiona(perdonad que no os nombre a todos porque sois muchos, pero daros por aludidos).
Ahora un grupo de locos por el baloncesto hemos recibido el relevo. Esperamos y deseamos seguir vuestro camino y que con trabajo, esfuerzo, dedicación lleguemos a cotas muy altas.
Vaya por todos vosotros que habéis ido sembrando la semilla y seguís velando para que la cosecha sea buena.
P.D.
A los más jóvenes, seguir empujando y pensar que sois el próximo relevo para las nuevas generaciones.

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